Nicomedes Guzmán

Nació en Santiago de Chile el 26 de junio 1914 en el barrio Club Hípico. “Hijo de un humilde heladero ambulante y de una laboriosa obrera doméstica”. Estudió en el Liceo Nocturno Federico Hansen. Trabajó como carpintero en el Barrio Matucana y posteriormente en una oficina de propiedades. Luego lo hizo en el departamento de Cultura del Ministerio de Hacienda con Luis Sánchez Latorre (Filebo). Director de una colección de libros de Editorial Cultura. Funda, con el escritor Oscar Castro, el grupo literario de Rancagua “Los Inútiles”. Un concurso literario auspiciado por la Sociedad de Escritores de Chile lleva el nombre del escritor.

Murió el 26 de junio de 1964, a los 50 años de edad.

El escritor.

Novelista, crítico, poeta, antologador. Narrador del proletariado. Es uno de los miembros más destacados de la generación del 38, cuya temática aborda el ambiente del proletariado, en la misma época y momento histórico. La materia a cubrir por el escritor es “ la injusticia social, la explotación, la vida miserable de los suburbios, la degradación moral en la pobreza y la corrupción del poder”.(Memoriachilena.cl)

Con él prácticamente se inaugura una nueva visión del mundo de los bajos fondos urbano.

Sobre el asunto hay una literatura “marginal” que no ha sido apreciada por las letras chilenas. Autores como Armando Méndez Carrasco, Alfredo Gómez Morel, Luis Cornejo y Luis Rivano, no han tenido la relevancia que su trabajo ameritaba. Mejor suerte tuvo Manuel Rojas con su libro Hijo de ladrón. Guzmán, a su vez, no estuvo tan desprovisto de buenas críticas al inicio de su tarea literaria.

La novela que representa mejor la temática trabajada por Nicomedes Guzmán es La Sangre y La Esperanza. Trata sobre la huelga de los tranviarios en la década de 1930. Aunque algunos puristas de la lengua le reprochan ciertos defectos del estilo, Guzmán acertadamente penetra en la tipología social de sus personajes, refleja, al través de la sicología, las raíces del resentimiento y las conductas violentas. Despierta un genuino anhelo de justicia. No obstante, no idealiza al pueblo ni desmejora al capitalismo. El dibujo de sus protagonistas es amplio y variado..

Ricardo Latcham dijo: “ En Nicomedes Guzmán no asimilamos las cosas por un proceso directo de propaganda, sino que nos sumergimos en el corazón mismo de la miseria”.(Historia y Antología de la Literatura Chilena, Montes y Orlandi)

“ En su vasta trayectoria, Nicomedes Guzmán se preocupó de afianzar tradiciones, abrir nuevos surcos profesionales, impulsar el trabajo de escritores inéditos, divulgar y enriquecer lo nacional creando medios y tribunas”. (MemoriaChilena.cl)

Por su parte, un critico conservador, pero inteligente, como lo fue Raúl Silva Castro, se expresó así de la obra de Nicomedes Guzmán: “ Los cuentos de Guzmán son patéticos, emotivos y están llamados a producir viscerales emocionales en el lector, especialmente la congoja y el llanto, ante la acumulación de iniquidades, injusticias y desgracias que suelen abrumar a los protagonistas. Este contenido refleja muy acertadamente un aspecto de la vida proletaria, el de la gente más destituida de fortuna, que pasa hambre y que debe mendigar o ejercer oficios viles para poder subsistir”.

Libros publicados

Nicomedes Guzmán publicó en vida un libro de poesía, cuatro novelas, dos textos de cuentos y seis antologías. “Los Hombres Oscuros y “La Sangre y la Esperanza” son sus novelas más populares. Su metódico y minucioso trabajo en las antologías publicadas sobre cuentos chilenos también representan un aporte interesante a la historia literaria de Chile. 

La nómina de sus libros es:

La ceniza y el sueño, 1938

Los hombres oscuros, 1939

Nuevos cuentistas chilenos, 1941

La sangre y la esperanza, 1943

Donde nace el alba, 1944

La carne iluminada, 1945

La luz viene el mar, 1951

Una moneda al río y otros cuentos, 1954

Cuentos de Baldomero Lillo, 1955

Carlos Pezoa Véliz, 1957

Autorretrato de Chile, 1957

El pan bajo la bota, 1960

Antología de cuentos chileno, póstuma, 1969 

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